NO SOMOS ETERNOS...

domingo, 28 de abril de 2013

Como recibe un aviso los bomberos y el tiempo de salida.

Bombero sale como una FLECHA
Normalmente mis publicaciones son sobre carreras de montaña/ naturaleza pero como bien reza el nombre del BLOG es Trail a FUEGO y no quiero dejar de lado mi profesión que tanto disfruto.
Ultimamente está de moda competir en ponerse el equipamiento completo en el menor tiempo posible pero un compi y yo le hemos dado una vuelta de tuerca al asunto. Hemos contabilizado el tiempo que se tarda aproximadamente desde que oímos el aviso hasta que salimos con el camión. En el video me equipo con el ERA (Equipo de Respiración Autónomo) aunque en la realidad esto ocurre de camino al siniestro. Por lo tanto el tiempo se reduciría a poco más de 1 minuto. Circulan por la red muchos videos equipándose a toda velocidad con pequeñas "triquiñuelas" para arañar unos segundos al crono. Nosotros no hemos querido desfigurar la realidad. Hemos ultilizado nuestros propios equipos, ni más grandes, ni más accesibles. Con los pequeños problemas que puedes encontrarte de verdad. Abrochándo todos los atalajes y cremalleras




y mi compi:

sábado, 27 de abril de 2013

Biosfera Trail Ciñera




Casi una semana después las agujetas han pasado a convertirse en recuerdos. El lema de la prueba rezaba así: " Tienes vértigo". A pesar del desnivel acumulado del que dicen es el mayor de cualquier otra carrera en Castilla y León en ese kilometraje y más bien debería haber sido : " Échale dos bemoles".
El epicentro de todo, Ciñera de Gordón, un pueblo minero de habitantes luchadores y aguerridos. Como tal, la carrera tenía que estar a la "altura". Tejerina, el hombre monte, importante artífice de que esta carrera se llevara a cabo ya me encandiló hace unas semanas cuando fuimos junto con Marcos y Miguel a saborear parte del paseín.
9 A. M: Cañones, pólvora, mechas cortas y la cerilla preparada para prender el fósforo. Me despido de mi compañero Robledo. Aquí no hay familia, no hay amigos, estás tu solo en todo esto, rodeado de gente pero solo. Vas a pasar horas contigo mismo. La cabeza en pruebas largas es más determinante que tus piernas. La relación que tengas con ella hará que te desplomes como nieve de primavera o que asciendas como el viento por cumbres escarpadas.
9:10: La carrera se estira y ya se ve quien va a por todas. Las naves principales surcan ya el horizonte dejando atrás buques y demás armada que llevará otros discurrires. Son veleros que henchidos de aire coronan la primera cumbre en un suspiro. La organización premia la llegada del primero con un cañonazo, un cohete que lo veo subir antes de su explosión. La idea es buena, pero la rabia inunda mi espíritu competitivo. Ya está ahi el primero?
9:30 Como buen buque de guerra avanzo con fuerza con aire a favor en bajadas pronunciadas pero hoy el viento no viene de popa. Los dias previos en Barcelona pateando como buen turista me han dejado tocado.


Los horarios ya no los tengo presentes. Si pretendo comparar estas cumbres con el mar, éste estaba enfurecido. Las cuestas golpean la quilla y me cuesta avanzar. Sale el sol y suben los metros acumulados y las temperaturas. Tras dos horas perdido en un mar de dudas, de falta de chispa, te planteas incluso el abandono. No lo estoy pasando bien. Pero es cuando te reformulas decisiones. No he venido a pasarlo bien. Al menos hasta que llegue a puerto. El sentimiento de placer vendrá a la postre y será exponencial al sufrimiento que haya conllevado.

Llevé una manopla con un botellín de agua. Consideré que sería suficiente con los avituallamientos pero me voy secando por dentro como por fuera. Las juntas se resecan y en las paradas organizadas devoro sandía, naranja, plátanos y agua. No es suficiente. Las subidas son tan pronunciadas que ya nadie corre, ya nadie dice nada. Me reservo las bromas más escuetas para los fenómenos voluntarios que inundan la carrera regalándote mentiras piedosas. El " ya no queda nada" creo que lo oí desde el kilómetro 4.
En un afán de seguir metamorfoseándome con un buque, llego al riachuelo que baja regando el precioso bosque del Faedo y me sumerjo en él. Ya me da igual todo y bebo como haría cualquier perseguido de cualquier película de forajidos de cualquier momento de la historia que agoniza y cae sobre el primer charco que encuentra. 
Ya solo quiero terminar. La última subida se me atraganta como un polvorón y lucho por no perder la estela que me precede. No se parar. No entra en mis planes, seguiré hasta que de verdad no pueda. El cresteo que se anunciaba divertido se convierte en un paseo hacia la cruz. 
Caídas, heridas e imposibilidad de correr lo convierten en una penitencia. Ya he escuchado el cohete del primer clasificado... Ya no siento nada, ni rabia, ni enfado, nada. El deporte aliena, sigo, solo pienso en seguir y llegar. Es este momento en el fondo para lo que entreno. Para vencer ese límite que no sabemos donde está. Lo busco y cuando creo haberlo encontrado, lo desplazo más allá. 
Próximo reto: CAMPEONATO DE ESPAÑA TCA.

Imágenes del recorrido de la carrera en un video cañero:
Biosfera Trail Presenta...

Y si quieres ver lo datos de mi carrera y el recorrido en un mapa en este enlace verás según GARMIN la burrada que hicimos unos cuantos valientes:
RECORRIDO Y DATOS DE LA CARRERA

lunes, 22 de abril de 2013

Trail Costa Quebrada. La carrera en fotos. (Segunda parte)

En la anterior entrada comenté el periplo del coche. Han pasado unos días hasta que han publicado fotos en la organización y hoy escribo desde una silla que me atrapa. Hoy mi cuerpo pide tranquilidad de otra carrera que hice ayer y de la que ya hablaré. Si al menos me dieran puntos por cada carrera, era catedrático.
La salida fue muy rápida y yo me quedé demasiado atrás. El camino se estrechaba y adelantar era imposible por lo que se formaban pequeños trenes con sus correspondientes vagones.

Los paisajes eran preciosos. Los pequeños momentos que la carrera y el excesivo barro permitian, daban más motivos para disfrutar del momento.
Mi carrera fue de menos a más. Encontrándome a medida que pasaban los kms mejor y más energético. Puedo decir y he comprobado en más de una ocasión que la noche importante para descansar no es la anterior, si no dos antes.
Se bajaba cerca del mar, no tanto como en la Kosta Trail que corrí el año pasado pero si toqué sal. Estas carreras con sube y baja a modo de tobogán me van estupendamente.
A pesar que en alguna subida tuve que andar fueron solo escasos metros. Todo lo demás a trote o al galope. El barro estaba omnipresente y dificultaba la carrera pero la hacía más divertida.
El final de la carrera fue extasiante. A pesar del cansancio propio de la carrera y la acumulación de kms sentia que mis piernas pedían más. Subia y bajaba con proyectos de calambres y alguna que otra caida pero con energía.
Disfruté mucho de esta carrera en un marco incomparable. Llegué dolorido pero en dos días estaba prácticamente recuperado. Estas carreras al lado de la costa se disfrutan mucho. Os las recomiendo a todos los que pensais en iniciaros en correr al amparo de la natura.

miércoles, 10 de abril de 2013

Costa Quebrada, Cama Quebrada ( parte 1)

Todos nos hemos metido alguna vez en algún evento, del tipo que sea. Esos momentos "previos" son muy importantes para afrontar con garantías cualquier situación comprometida sea cual sea. Quedar con una chica por primera vez, quedar con tu mujer por última vez, ir a competir o comerte un escarabajo rebozado. Normalmente, empiezan los nervios unos días antes hasta que te metes en faena y pasas a sentir otro tipo de emociones.
En esta carrera me metí en faena 18 horas antes de lo normal, exactamente cuando monté en el coche con el firme propósito de pasar la noche previa divisando el mar desde la misma linea de salida, bucólico total. Aunque para mucha gente, yo lo único que hago es correr al más puro estilo forrestiano lo que busco son realmente experiencias, aprender y ver el mundo desde diferentes puntos de vista.

Salida de León sobre las 14h. En el maletero, una nevera con refrigeración propia via conexión mechero. Colchón de aire de 1,20m, comida de mama para los días posteriores que como buen hijo siempre acepto, ropa de playa, y el material de trabajo para la carrera.
Llegada a Liencres sobre las 17h. Durante el viaje mucha nieve llegando a la montaña palentina. Y mi bañador intentando salir desesperadamente de la mochila y gritando que se quería volver a casa. Menos mal que no lo hizo porque al final sería determinante.

Recojo dorsal y me encamino a la primera ubicación campera que termina siendo desechada por lo popular del "spot". Creo que debía ser un sitio estilo "los pinos" para hacer guarreridas varias. Yo allí solo podía parecer un enfermizo voyeaur o como dice un colega, un matorralero que es peor para la integridad de mis elementos personales... Si ya de por sí, la situación era novedosa, pienso que los curiosos se estarán haciendo miles de preguntas, aunque lo más probable es que se limitaran a pensar básicamente: " que hace el tonto este aquí que nos ha jodido el polvo.."
Nueva base de operaciones:

Empiezo a montar el tinglado ante la sorprendida mirada de furgoneteros fumándose unos porros.

Empieza a oscurecer, me emociono y bajo a recorrer la playa que tengo a 20 metros.

Me digo, esto es inolvidable, es la primera de muchas. Me sale la parte irracional y me adentro entre piedras afiladas y rocas resbaladizas. Me como unas lapas crudas que no están tan malas y me vuelvo al coche. Estoy impaciente por probar mi super hotel.
Mi coche palaciego de una sola habitación da para poca historia. Me meto en el saco y me pongo con "Danza de Dragones". La verdad que la situación en ese momento era idílica. Leyendo aventuras de un mundo de fantasía, mientras de banda sonora la lluvia contra la chapa del coche y las olas de fondo rompiendo me hacen sentir un ser afortunado dentro de la lata de sardinas.
LA CENA!! todo lo que tenia pensado hacer con infiernillo, calentar una infusión, hacerme un chocolate, un bocata... todo se va al garete. Puré frio del bote y un trozo de chorizo. La tierra no espera como en casa y la luz se desvanece..y ahora que hago? pues dormir, no queda otra. Dos horas, hasta que me despierto con unas ganas de mear atroces y algo de frío.. Joder, a ver quien sale ahora de aquí en gayumbos, todo oscuro, las zapas que no aparecen..Podría bajar la ventanilla...no no, que lo último lleva menos presión y la lio. Me bajo, relajo y para adentro. El lugar se ha plagado de furgoneteros. Vuelvo a meterme en el coche. 8 grados marca. Me recuesto y buscando la posición en el "divertidísimo" colchón de aire, rompe el silencio la alarma de mi coche. Coño!!, las llaves?, leches, leches, parece que tocaba a filas. Pensaba que podrían salir todos los porretas con bates de baseball y partirme focos pero no. Consigo acallar el rugido infernal tras varios cabezazos contra el techo del coche que ha bajado más de lo que parecia al principio. Moverme es más difícil que peinarme. Me quedo dormido. 3:30 A.M. Despierto. Creo que mientras dormía han transladado mi vehículo desde la costa cántabra hasta Groenlandia. Mis pies han desaparecido, las piernas congeladas, las muñecas doloridas del escorzo máximo para introducir las manos en la sobaca mora, la nariz fría como una lata de coca cola...No aguanto!! Busco el pantalón del chandal, aparece al fondo y para mi horror está empapado de la condensación del cristal, jamás secará. Ese algodón amoroso se vuelve peor que la esponja mojada y fria que existe en todas las bañeras. Enciendo el coche. 4º me marca. ¿Pero no estoy en la costa? Empiezo a mirar hacia afuera. Está claro que situaciones extremas tiran por tierra cualquier moralidad. Veo desde mi escondrijo casas cerradas a cal y canto. Típicos chalets de veraneo que podría asaltar y meterme en sus más que probables camas calentitas y confortables. Valoro alarmas, perros, persianas, cerraduras...aguanta solo quedan 4 horas...

Enciendo la calefacción a tope. Ni en 40 minutos se calentó lamadriguera. Termino por apagarlo no sea que me quede sin gasolina o me vengan a llamar la atención. Me acomodo, y otra vez la alarma del coche, cagüen ros!! al arrancarlo y apagarlo se resetea la función de desconexión de ese ruido infernal. Y ahora si, espero a que se abran las puertas de las furgonas y aparezcan zombies o tíos con caretas de portero de hockey a hundirme en el mar. Gracias a Bob Esponja no salen pero ya me cago yo en Mister Decibelio. Me incorporo, ZAS..cabezazos no se los que llevo ya. De 6 a 8 creo que lo único que hago es maldecir a Mario Picazo, a las borrascas y a mi saco de pichi glass. A las 8A.M recojo y me voy de allí antes de que nadie me pueda reconocer.
Desayuno Nuttella a cucharadas, lomo y tomate. Si, se trata de un desayuno recomendado por el ministerio de educación física y del deporte. Todos los males desaparecen con el chocolate inundando mi boca y el amanecer, mis ojos.